Capitulo I-
Aceptando mi realidad.
"Al dia siguiente un helicoptero nos rescato,
nos subimos al techo del edificio,
al salir me di cuenta de que el desastre era mas
grande de lo que parecia, aun habian cadaveres
flotando en el agua, escombros, animales muertos,
jamas en mi vida imagine una escena como esa...."
Todos dormian o parecian hacerlo, se veian agotados, exaustos, en esquinas de aquella oscura habitacion, solo la timida llama de unas velas iluminaban el lugar, al parecer no sentian el frio del piso donde estaban acostados, una pareja y su pequeña hija aferrada a ellos, aun sin comprender como habian sobrevivido a aquel desastroso suceso, yo aun miraba hacia abajo a traves de la ventana, la ciudad estaba iluminada por la luna, el cielo despejado y tranquila, en contraste con lo que se observaba en aquellas calles, bueno… ya no eran calles, era el mar, si, el mar dentro de la ciudad, habia parado de llover hace rato, senti que me estremecia de vez en cuando, estaba temblando pero no me percataba de ello, mi ropa aun seguia mojada al igual que mi pelo.
Recorde a mis padres, mi hermano, donde estarian?, hallarian un edificio igual a este donde estarian refujiados? o habrian sido arrasados por las olas al igual que sientos de personas? una mano me sostuvo el brazo, ni siquiera me inmute al contacto, mire a mi lado, mi tio estaba parado mirando tambien hacia afuera.
-No hay mas nada que hacer. - dijo, con su vista aun fija hacia ningun lado.
-Talves esten bien. -dije con voz a penas entendible, trataba con todas mis fuerzas no llorar, en ese momento recorde la voz de mi padre... "no dejes que nadie te vea llorar, sarah, pareceras devil!!!" me decia enojado.
Nos sentamos en una esquina de la habitacion, en silencio.
-No todos han muerto. - dijo mi Tio, en ese momento recoste mi cabeza sobre su hombro, me abrazo al instante, aun estaba empapada pero no le importo, sabia todo el miedo que estaba sintiendo en ese momento, fue el primer contacto tan cercano que tuve con el desde que era niña, aun recuerdo como me cargaba y me lanzaba al aire, para sostenerme al momento de llegar a sus manos, era tan pequeña, me gustaba que jugara conmigo, me reia mas con el que con mi padre, este siempre estuvo su actitud de seriedad ante todo.
Mio tio solo llevaba dias en el pais habia regresado de Argentina, donde paso los ultimos 9 años, antes de regresar a su tierra natal, antes de regresar con nosotros, su familia... que ya ni siquiera existia. No recuerdo cuando quede dormida, pase toda la noche soñando con mis padres, despertaba y volvia a dormir, a soñarlos.
Al dia siguiente un helicoptero nos rescato, nos subimos al techo del edificio, al salir me di cuenta de que el desastre era mas grande de lo que parecia, aun habian cadaveres flotando en el agua, escombros, animales muertos, jamas en mi vida imagine una escena como esa. Nos llevaron a un refugio, en unas de las ciudades que habian sobrevivido a las olas, donde no habia llegado el agua. Estabamos rodeados de prensa, y todos preguntaban que habiamos pasado, nos preguntaban por personas que no conociamos, los flash de las camaras estuvieron a punto de cegarme, todos se nos echaban encima tratando de hablar con nosotros y saber lo que ya sabian, "histeria colectiva", sostuve la mano de mi tio que caminaba delante de mi, pense que me perderia en el tumulto de aquellas personas.
Los dias siguientes nos hicieron examenes medicos y cuantas cosas se les ocurriera, mi tio hizo algunas llamadas, conocia gente que nos podria ayudar en ese momento, aproveche mientras hablaba en el telefono publico, no se con quien, para preguntar a una de las personas que trabajaban como voluntarios que sabria de los sobrevivientes, si tenian alguna lista donde pudiera buscar a mi familia, pero este no sabia nada, dijo que eran muy pocos los que habian salido con vida de aquello, y que si podria enseñarme una lista de los cadaveres identificados, de los pocos que pudieron recuperar, no quise verla! Me negaba a mi misma la idea de que mis padres hubieran muerto, estaba segura que estaban vivos en alguna parte de la ciudad.
Conforme pasaban los dias, la ciudad fue recuperandose, la prensa dejo de asediarnos, y algunas personas que habian contactado con familiares dejaban el refujio.
-Nos iremos. -dijo mi Tio, mientras se acercaba a la cama y ordenaba algunas cosas.
-Que?! Adonde? -pregunte sorprendida, observando todo el lugar, quedaban pocas personas.
-Al sur, tengo un amigo, un buen amigo, nos ayudara, estuvo conmigo en Argentina, se regreso primero que yo, pudo desarrollarse aca, y no tiene problemas en darnos una mano.
-Pero no podemos irnos, aun no los hemos encontrado!
Mi tio ignoro mis palabras, y siguio ordenando las cosas que quedaban, ropas que fueron donadas y algunas que otras cosas. Las metia en un bulto, ni siquiera levantaba la mirada.
-Hey!!! -le grite, todos los que estaba alli miraron sorprendidos, y luego siguieron en sus asuntos, mi tio me miro asombrado, pero molesto a la ves.
-Dije que no podemos irnos! Tenemos que esperar.
-Esperar a que? Sarah... ya han pasado varios dias, no podemos seguir aqui.
-Pues te iras solo!!! voy a esperarlos, ya hable con uno de los voluntarios, dijo que en cuanto sepa algo me avisara, tiene sus nombres, se que estan bien, talves estan en otro refugio, si nos vamos los perderemos! -le dije a mi tio, tratando de convencerlo. levantandome de la cama.
En ese momento el voluntario que me ayudaria, se acercaba a nosotros, con unos papeles, en sus manos
-Eres sarah, cierto?...
-Si! si lo soy. -respondi nerviosa, sabia que tenia noticias de ellos. Mi tio me hecho a un lado y trato de hablar solo que aquel chico.
-Hey quiero saber, que tienes? sabes donde estan? -le pregunte.
-Hemos encontrado dos personas, llevaban identificacion, concuerdan con los datos que me diste Sarah.
-Y? como estan? donde estan? -me acerque al chico, e intente quitarle los papeles, pense que esos papeles que llevaba decian algo de mis padres. Puedo verlos? saben que estoy aqui? -segui preguntandome sin percatarme de las miradas de ambos.
-Sarah... encontramos los cadaveres. Por lo ocurrido estan irreconocibles. Llevaban identificacion en sus ropas.
Silencio... el silencio mas largo y estremecedor de mi vida.
-Que?... –pregunte-.... Como? no estan...? no pude terminar la oracion. Mi tio me sento en la cama. Aquel sujeto de la noticia mas amarga de mi vida se retiraba del lugar, dijo algunas palabras de consuelo pero para mi no significaban nada.
-Sarah lo siento, tambien era mi familia, lo siento... -dijo mi tio, mientras se sentaba a mi lado.
Mire hacia el abismo, el abismo que se habia formado en mi alma, quise llorar, quise gritar sus nombres a todo pulmon, quise levantarme de esa maldita cama y tirar todo lo que habia alrededor, quise salir corriendo, correr y correr sin detenerme, pero me quede alli, sentada, respirando, escuchando la voz de mi padre "no dejes que te vean llorando...devil". Me levante, tome el bulto donde mi tio entraba la ropa, y continue guardando todo.
-Tenemos que irnos. -dije.
-Sarah...
-Tenemos que irnos.... - Lo mire por unos segundos y volvi a guardar todo.
Esta historia continua en los proximos capitulos, siguelos...
